domingo, enero 21, 2007

[ Igual siempre sale algo más ]


Eran las doce menos diez cuando fui a dejar a mi amiga Denisse a su casa. En el camino me encontré con mis amigos a quienes vi con cara de “no tengo ganas de carretear, pero hagamos algo”. Solo les dije de paso que a la vuelta pasaría y haríamos algo en mi casa.

Dicho y hecho al retorno de mi corto viaje no los encontré por ninguna parte y solo atinaron a llamarme y decirme si estaba en casa. Les dije que viniesen no mas y a los 10 minutos estaban en mi casa.

La idea era simple, no había mucha plata como para carretear pero si como para pasarlo bien un rato conversando de la vida. Pero últimamente cada vez que no hay nada, siempre sale algo mejor de lo esperado. En este caso fue que salieron más chelas de lo pensado y un estupendo ron Bacardi.

Las horas pasaron volando. De la nada comenzamos a decirnos cada una de nuestras características y nuestras falencias, pero siempre en buena onda nada de descalificativos e incoherencias. Las descripciones que pensábamos cada uno de nosotros de los otros eran similares y no diferían en gran parte de lo que siempre veíamos en grupo.

Como sea que haya resultado eso, me pareció interesante y un muy buen ejercicio si se hace con respeto y en muy buena onda.


Cigarros y Ron, son solo un complemento no indispensable.




2 comentarios:

Nicole dijo...

ahh..eso me recuerda a los carretes que tengo en la playa.
Son bacanes...mas aun si surgen buenos temas de conversacion.
Saludos!

Anónimo dijo...

Son raras las ocasiones en que te dicen tus defectos y no es para insultarte.

Saludos!